EL VERDADERO AMOR
Pasaron los años y las nubes
el viento sopló esparciendo mis cenizas
y un día desperté de azul soñado
con la sensibilidad viva de mi alma
Pasaron las noches colmadas de estrellas
tu recuerdo inundaba mi memoria
y al convencerme de que pensaba
quise probar si podía desear
A la mañana siguiente me persuadí
que desear estando ya muerto
era la mejor manera de demostrar
que un ser que no respira existe
Y entonces noté una luz que se aproximaba
eras tú bañada en el bálsamo de tu ausencia
y cuanto más cerca, más la pasión me envolvía
rescatando mi cariño de escenas y siglos
Vi que el sol sonrió como cuando era niño
y la luna tímida se puso roja ante nosotros
te abracé sin relojes que marcasen el tiempo
hasta juntar nuestros labios celestiales
Y a quien me pregunte, yo le diré
cómo es el verdadero amor, sin piel
sin sonidos, ni sudores, ni palabras
solo la eterna verdad en nuestro verbo
2024 © Texto: José Manuel Fernández
2017 © Foto: Joe Yates