SONETO DEL RUISEÑOR
.
Un ruiseñor había que al amanecer cantaba
afinando para ti mi soneto más apasionado
tristón, de plumaje pardo y pico azafranado
cómo recitaba, que tu rosa su melodía amaba
.
Yo ignoraba por qué mis versos declamaba
de su trino de miel mi oído vivía enamorado
no sabía cómo el ave mi poema había robado
dando a mi alma la serenidad que yo anhelaba
.
Años pasaron y mi nostalgia de ti seguía callada
como si te acabase de perder de esquiva suerte
el ruiseñor aún gorjeaba tu mirada más soñada
.
Un día ya no oí el canto armonioso, mi muerte
me abrazaste y me dijiste que eras tú mi hada
la que daba voz al ave para salvar mi vida inerte
.
2023 © Texto: José Manuel Fernández
2015 © Ilustración: Vsalasni
.